domingo, 4 de diciembre de 2011

QUERIENDO SER UNICOS.

Chile, País de poetas, de maestros chasquillas que tienen la solución para todo lo imaginable y de lo otro también. Donde la realidad se inventa, se sueña, se crea en base a lo que nos gustaría. Donde el deseo cambia la realidad, como el paracaídas de Huidobro que en lugar de bajar, sube. Porque aquí tenemos el don de saber lo que nadie más sabe, de idear lo que nadie nunca imaginó, hasta que nos enteramos que nuestro error es un plagio de otro anterior. El lugar donde la ley de gravedad no es necesariamente como todos se imaginan, hay que adaptarla a la realidad nacional -dicen-, porque Chile es distinto, y no es nuestra culpa, las cosas son así, es el imperio el responsable, son los otros los que no entienden lo que nosotros creemos entender. Tenemos que crear un Chile nuevo para los chilenos, algo que no funcione como se supone, ya que si lo hace ya no sería nuestro, aquí las cosas no son como los demás creen. ¿No ven que aquí hay muchas necesidades? –dicen-. Alguien tiene que hacer algo, pero ese algo tiene que ser lo que yo digo, aunque lo haga otro, porque yo no puedo hacerlo, ¿no ve que yo tengo muchos problemas? – también dicen-.
Chile, el País donde todo funciona a medias, donde el partido comunista quiere hacer comunismo pero sus miembros no son comunistas, sobre todo si son jóvenes y hablan bonito. Donde las bombas le explotan al que no las estaba poniendo, pero da lo mismo ya que las prueban se caen, viven en el suelo de los tribunales donde dejan de existir de muerte natural. Donde hay que ser de izquierda para no ser de derecha y donde hay que ser de derecha pero que no se note tanto. Donde las colusiones de precios no quieren decir que existan monopolios. Donde las encuestas son la bola de cristal donde se ve el futuro, el bueno y el malo. Donde se luchó por la democracia para defender la libertad de expresión, y ahora crean leyes mordaza porque está bien la libertad, pero no tanta, y esta bien la expresión, pero no cualquier expresión. ¿No ven que entre tanta expresión la gente se puede dar cuenta de cosas que no les convienen?. Por eso hay que proteger a la gente, de que no pierdan su ignorancia, la que les da la alegría de vivir, la esperanza de un mañana mejor, de que el maestro chasquilla esta vez si le achunte, de que el poeta de turno invente algo nuevo, de que la realidad no sea tan real que los agobie. Porque hay que seguir viviendo, y así como están las cosas no hay quien viva.
Chile, País de realidades intrincadas, ciegas, sordas y mudas cuando a alguien le conviene. Donde lo que fue el bien ahora es el mal, y viceversa. Donde la irrealidad y la realidad se entremezclan para crear cualquier cosa, esa cosa chilena de no ser pero ser a la vez. De seguir siendo mientras se pueda y mientras el poeta de turno no se suba al escenario a recitar otra cosa. Esta si que si, esta funcionará, porque yo lo digo, y porque esto es Chile, y aquí cualquier cosa puede pasar.

6 comentarios:

  1. Maximo:
    Notable, te felicito; pocas veces he visto un disparo mas certero.
    Hecho el diagnóstico, claro, especifico y preciso (?), ahora tenemos que ponernos a trabajar, para que sepamos hoy que es lo que nos vamos a dar cuenta mañana que deberíamos haber hecho ayer.
    Tu que sabes de blogs,hay alguna forma como comunicarse en privado, via mail, por ejemplo?
    Saludos cordiales.

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  2. Francisco. Si me quieres decir algo en privado lo puedes hacer a esta mail.

    maximo.11.09.73@gmail.com

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  3. Dices Tenemos que crear un Chile nuevo para los chilenos.

    A'i ta lo malo. Pides demasiado. Confórmate con algo nuevo en un poquito de Chile y para unos poquitos chilenos. Una zona autónoma. No más. En un descuido cunde el buen ejemplo. Querer más es jugar el juego de los colectivistas, los estatistas, socialistas, etc. Y mientras juegues su juego, estás perdido.

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  4. William. O yo redacté mal o tu entendiste mal. Los que siempre están tratando de crear en Chile algo “nuevo” son los políticos “vende humo”, y eso es lo que yo critico. Las cosas simples las enredan.

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