La Claudia decidió querellarse en contra de la revista Qué Pasa. Espero que
la querella sea muy bien ventilada por toda la prensa que aún no se ha vendido
al sistema, y que en medio de la querella se pueda comprobar que Bachelet,
independientemente de si esperaba o no recibir una parte del botín, no se enteró
por la prensa.
Porque algunos aun podrán suponer que la Claudia no iba “en la pará”; lo
que no pueden suponer es que la señora ni siquiera sospechaba de que se trata
esto del servicio público, ese negocio cuyo giro principal es vivir del dinero
de los ricos y el voto de los pobres, para lo cual es necesario proteger a los
ricos coludiéndose con ellos, y perpetuar a los pobres haciéndolos depender de
los impuestos que ellos mismos pagan.
Esta querella tal vez puede servir para demostrarle a algunos ilusos que aún
quedan por ahí, que el totalitarismo no solo se obtiene a partir de un golpe,
pronunciamiento o como quieran llamarlo, y no me refiero al caso chileno en particular.
El totalitarismo generalmente deviene de una revolución o de una elección. El mantenerlo
en el tiempo depende de los revolucionarios o los representantes electos a través
de las urnas.
Desde que estalló el caso Penta, y Peñailillo y compañía se deleitaban persiguiendo
adversarios a través del SII, y filtrando o mandando a filtrar informaciones
desde la Fiscalía, este sistema no ha parado ¿Y por qué a Bachelet no le pueden
filtrar algo que desde luego es de interés público?. Recordemos que
Carabineros, otro organismo público, fue quien grabó la conversación de Díaz.
La señora ostenta un cargo de elección pública, esa es la principal razón por
la que no solo es aceptable la filtración, sino necesaria. Esta cantinela de la
dignidad del cargo tal vez era sostenible ante el pueblo durante la Edad Media,
hoy no hay cargos dignos, sino mandatos a plazo fijo, que los propios secuaces
de la actual mandataria quieren hacerlos revocables anticipadamente a través de
un plebiscito ¿Cómo se puede informar la gente de los actos de sus mandatarios si
no es a través de filtraciones y noticias de prensa no sumisa al poder?.
Publicar una conversación obtenida por la misma autoridad a través de un
procedimiento, se supone, lícito, no pude ser delito, al menos no en un país que
se dice democrático.